Magister en Ciencias Sociales con mención en Sociología de la Modernización / Uno de los argumentos en que se fundamentó la Ley de Subvención Escolar Preferencial (SEP), promulgada en el año 2008, se basa en el reconocimiento que las características de los estudiantes implican costos diferentes, y que el nivel socioeconómico y cultural de las familias son factores importantes a la hora de explicar las diferencias en los resultados educativos. Precisamente, la Ley de Subvención Escolar Preferencial (SEP) intenta ser una respuesta al desafío de avanzar hacia una mayor equidad y mejor calidad de la educación, focalizando recursos en los estudiantes más pobres.
Estos recursos se entregan a través del sistema de subvención escolar, que se viene implementando desde 1981. Por cada estudiante que se matricula en un establecimiento público o privado subvencionado, la escuela recibe el subsidio directo por parte del Estado; si el estudiante decide cambiarse de escuela, será el nuevo establecimiento quien recibirá el subsidio. La aplicación de este subsidio a la demanda o vouchers – como lo denomina la literatura especializada- es conocido como “los fondos que siguen al niño”, financiamiento que se entrega a la escuela elegida por los padres” (West: 1998).
Algunos autores han precisado algunas limitaciones del sistema de subvenciones aplicado en Chile. En tal sentido han indicado que: “Si se tomara en cuenta en el valor del voucher que existen alumnos más caros, aumentando el valor de la subvención para los más desaventajados, se obtendría mayor y mejor oferta para ellos. En tanto no se haga así, es lógico que exista “descreme” ya que es probable que el voucher sea insuficiente para enseñar a los más desaventajados, haciendo poco atractivo para escuelas privadas subvencionadas aceptarlos. Por tanto el problema es del diseño del sistema de vouchers no de su esencia” (Aedo y Sapelli, 2001:33).
La SEP, bajo esta lógica, viene a corregir un problema de diseño del sistema de
vouchers, su valor considera que existen alumnos más caros de educar, proporcionando mayor y mejor oferta para ellos, perfeccionando los mecanismos de competencia. La SEP en este sentido implica que un grupo de personas adquiere el derecho a elegir la escuela para sus hijos incluyendo una gradación del vouchers según costo de educar a los estudiantes.
Los recursos diferenciados de subvención se focaliza a los estudiantes categorizados por ley como “prioritarios” y que cursen el primer o segundo nivel de transición de la educación parvularia y educación general básica. Esta subvención la impetrarán los sostenedores que se suscriban a la SEP, estableciéndole requisitos a través de un Convenio de Igualdad de Oportunidades y Excelencia Educativa que permite liberar de costos al estudiante prioritario por concepto de colegiatura, no seleccionar por rendimiento académico y establecer procesos de mejora en la atención educativa que permita elevar los aprendizajes de los estudiantes por sobre todo de los “alumnos prioritarios” e informar a las familias sobre la existencia del convenio con énfasis en las metas fijadas por rendimiento académico.
Esta Ley se fundamenta en el supuesto que las familias beneficiadas a través de la subvención y de la lógica de libre elección, tomarán decisiones racionales y optarán por mejores escuelas que beneficien a sus hijos y les permitan avanzar en sus aprendizajes.
Se supone así una familia demandante e informada que tiene las características necesarias para elegir el establecimiento más favorable. La información con que cuente la familia del programa, le permitirá tener un mayor conocimiento y mayores atribuciones sobre el proceso escolar. Así se busca mejorar la calidad en el sistema escolar, con familias empoderadas que mantengan el control y la eficiencia escolar demandando servicios educativos de calidad a la escuela.
En este marco se configura un nuevo trato establecido entre la familia y la escuela. Las familias reciben beneficios a través de la SEP, la escuela para recibir estos recursos de subvención preferencial y aportar a esos beneficios, debe dar cumplimiento a las exigencias de requisitos establecidos en el Convenio.
Cabe destacar que esta Ley se está implementando hace tres años a nivel país. Hasta ahora la revisión de la literatura especializada señala extensos estudios empíricos nacionales e internacionales centrados en el análisis, y evaluación del impacto que el subsidio a la demanda educativa ha tenido en la calidad y equidad del sistema educativo. Estos estudios se han situado principalmente en el subsidio a la demanda desde la perspectiva de la oferta educativa. Otros escasos estudios nacionales enfocados desde la demanda, se han situado principalmente en la elección que realizan las familias de un establecimiento educacional. Sólo se ha podido constatar de estudios internacionales que dan cuenta de experiencias de subsidio a la demanda, especialmente en Estados Unidos exponiendo entre otros temas resultados respecto a la participación de las familias en programas con el uso de vouchers.
Por lo anterior, cobra interés el estudio a fin de aportar mayor información y comprensión del vínculo. Indagar en la relación -entendida como la correspondencia, o conexión- entre la familia y la escuela, con los nuevos elementos que incorpora la SEP.
Por tanto, conocer las relaciones de la familia con la escuela en este contexto, es lo relevante. La posibilidad de movilidad hacia otros establecimientos se verá o no acrecentada, o por lo menos el derecho de uso de voz para obtener mejoras del servicio del actual establecimiento y por ende permanecer en este. Es interesante saber cómo los establecimientos educacionales manejan la comunicación con los apoderados respecto del programa SEP, qué tipo de información entregan, cómo interpreta la familia que su hijo sea caracterizado como prioritario y su injerencia en los aportes que recibe la escuela por esa categorización y en las acciones que se realizan para mejorar sus aprendizajes.
Conocer la experiencia permitirá indagar sobre el vínculo, si éste se tensionará y cómo.
En este contexto qué cambios experimenta la familia en su relación con la escuela, y si se producen estos cambios, cómo los interpretan.
A partir de estas interrogantes, se formuló el siguiente objetivo general de la investigación: Conocer y comprender los sentidos de la relación entre la familia y escuela en el marco de la Ley de Subvención Escolar preferencial (SEP).
Los objetivos específicos:
a) Indagar cómo interpreta la familia del alumno/a prioritario, la nueva categorización de su hijo o hija y los beneficios que le otorga la Ley SEP.
b) Conocer las experiencias de relación de la familia con la escuela.
c) Comprender los aspectos que la familia valora en su relación con la escuela
d) Conocer las percepciones de los actores en relación a la Ley SEP.
En términos específicos este estudio, y de forma cualitativa, se plantea responder las siguientes interrogantes: ¿Cómo y en qué sentido la implementación de la Ley de Subvención Escolar Preferencial influye o no en la relación de la familia con la escuela? Interrogante que conduce a las siguientes preguntas exploratorias:
- ¿Cómo interpreta la familia la categorización de alumno prioritario de su hijo o hija y los beneficios que le otorga la Ley?
- ¿Qué significados atribuye la familia a la condición de alumno prioritario?
- ¿Exigen las familias los beneficios que les corresponden por la SEP? Si se presenta o no esta exigencia ¿qué hace que se dé esta situación?
- ¿Genera la Ley SEP movilidad por parte de las familias hacia otras escuelas?
- ¿Se tensiona o no el vínculo existente entre la familia y la escuela?, ¿Cómo y por qué?
Para guiar la investigación y dar respuesta tentativa a estas interrogantes se plantea la siguiente hipótesis: La familia y la escuela, y la relación entre ellas, inciden en el aprendizaje escolar de los niños y jóvenes. Al respecto y de acuerdo a la información de los beneficios que entrega la Ley SEP a las familias de los alumnos prioritarios, éstas podrán acceder sin costo a escuelas suscritas al programa y sus hijos recibir atención educativa específica a sus necesidades educativas de modo que vean mejorados sus niveles de aprendizajes y las familias sean parte activa de las acciones involucradas para dicho mejoramiento. Este nuevo escenario que promueve la Ley SEP y su implementación, que requiere de dispositivos en la escuela, de manera de promover una cultura de mejora escolar, se verá tensionado por la falta de procedimientos de gestión de la escuela que permita generar acciones especificas y sistemáticas de apoyo e involucrar más directamente a las familias de manera pertinente y oportuna de acuerdo a las acciones de implementación del programa SEP.
El estudio pretende dar cuenta de la influencia de la implementación de la SEP y, a partir de este marco, ahondar en los sentidos de la relación familia y escuela. A su vez, busca develar posibles aciertos y vacíos de su implementación y a partir de ello plantear propuestas de estrategias para contribuir al logro de los objetivos de la Ley SEP en el sistema escolar y, por ende al desafío de mejorar la calidad y equidad educativa en Chile.
La exposición de la investigación, que se presenta a continuación, se ha estructurado en nueve capítulos. Los tres capítulos que le siguen son introductorios, en tanto aportan antecedentes sobre la metodología del estudio y los planteamientos teóricos respecto del tema. En el segundo capítulo se detalla la metodología utilizada para producir y procesar la información. En tercer capítulo se entrega antecedentes de la Ley SEP y acerca del contexto en que se sitúa, caracterizando el sistema educativo chileno y el sistema de subsidio a la demanda, ampliando lo que plantea la teoría y las discusiones del sistema de vouchers. En el capítulo IV, se aborda el Rol de Estado en la Educación, sus transformaciones e implicancias en la escuela y la familia. A partir del capítulo V se comienza a indagar el vínculo de la familia con la escuela. De esta manera en dicha sección se describe que hace que la familia de los alumnos prioritarios se haya vinculado a esa escuela y no otra, de modo de ir estableciendo relaciones de la experiencia. El capítulo VI caracteriza la forma cómo se informan las familias de los alumnos prioritarios del programa SEP y cuál es la información que disponen, un capitulo central si se tiene en cuenta que el acceso a la información es el supuesto básico para la efectividad de esta política pública. En el capítulo VII, se amplía la experiencia detallando información de las apoderadas informadas de los beneficios y la categorización de su hijo como alumno prioritario y se rescata de sus relatos las interpretaciones y significados a esta categorización. El objetivo de tal apartado es facilitar la comprensión y profundizar en los significados de la categorización. En el capítulo VIII, se abordan las distinciones de las familias de los alumnos prioritarios, respecto de su experiencia en la escuela y sus expectativas respecto de ella. En el capítulo IX, se caracteriza el trabajo que realiza la escuela con las familias en el contexto del programa SEP.
Finalmente se retoman las ideas centrales de la investigación y se resumen resultados, para terminar con las consideraciones finales y desafíos pendientes.
Identifer | oai:union.ndltd.org:UCHILE/oai:repositorio.uchile.cl:2250/113321 |
Date | 21 July 2011 |
Creators | Soto Aranda, Erika |
Contributors | Reca Moreyra, Ínes, Facultad de Ciencias Sociales, Departamento de Sociología |
Publisher | Universidad de Chile |
Source Sets | Universidad de Chile |
Language | Spanish |
Detected Language | Spanish |
Type | Tesis |
Page generated in 0.0038 seconds