Magíster en Gestión para la Globalización / En este trabajo se aborda el mejoramiento organizacional que deben alcanzar tres compañías que prestan servicios a la minería, con el objetivo de alcanzar la categoría de empresa de clase mundial, por medio del desarrollo de áreas específicas al interior de sus instituciones.
Actualmente Chile es reconocido como uno de los países con mayor potencial minero del mundo, lo que sumado a la actual demanda de bienes, insumos y servicios mineros, así como la existencia de un marco político, económico, social y legal estable permiten proyectar un explosivo crecimiento de las empresas proveedoras locales, de la minería.
En este escenario se generan oportunidades de desarrollo únicas, al menos en el estado inicial de estas empresas, gracias a la comprensión, de las necesidades particulares, que tiene del ámbito minero, y a la ventaja con que cuentan al operar, permanentemente, en un mercado imperfecto, como el chileno, sobre las compañías provenientes de países desarrollados.
Mediante una recopilación bibliográfica de trabajos recientes, se configura un marco teórico que detalla tanto el entorno propicio para el desarrollo de empresas de clase mundial como las propiedades esenciales que las caracterizan, se enfrenta el problema del alto desarrollo organizacional que deben alcanzar tres pequeñas empresas que actualmente son proveedores del rubro minero.
Desde el punto de vista de las empresas, resulta beneficioso alcanzar este desarrollo al poder explotar las oportunidades que se generan al ser globalmente competitivo. Para el mercado minero local significa contar con la disponibilidad de empresas de alto estándar operando en Chile.
Para la correcta realización de este trabajo se levantan encuestas y entrevistas presenciales, a altos ejecutivos de las empresas, y se participa, con ellos, en talleres de desarrollo organizacional, con el fin de caracterizar el estado de cada empresa y verificar la magnitud de los recursos puestos por las empresas en su ruta de clase mundial; se proponen medidas que permitirían encauzar esta ruta.
Una fuente de ventaja competitiva, duradera y segura, resulta del conocimiento específico: las empresas exitosas son aquellas que consistentemente crean conocimiento nuevo, lo diseminan ampliamente en toda la organización y lo incorporan rápidamente en nuevos productos y tecnologías, con el propósito de mantener, de manera continua, la innovación. En este contexto las empresas analizadas deben generar soluciones que impacten indicadores claves de sus clientes, como eficiencia, costos o retornos sobre la inversión, que les permitan entrar en un ciclo de predilección por parte de sus clientes.
El camino a seguir en la ruta de la clase mundial implica, como factores de relevancia, el llegar a ser más eficiente y productivo, fomentar la innovación, desarrollar y mantener buenas relaciones tanto dentro como fuera de la firma, pensar de manera estratégica, estar dispuesto a mirar y a moverse en nuevas direcciones, usar tecnología de punta e invertir en el futuro de la firma e industria, mirando no solo el desempeño de corto plazo. Estos factores deben ser continuamente monitoreados por las empresas que buscan la clase mundial. Se deben establecer objetivos estratégicos e índices, de revisión trimestral, que den una idea de la salud del negocio, en cuanto a personal, producción y productividad, satisfacción de los clientes, captura de usuarios, situación de mercado y posición competitiva, administración y márgenes obtenidos.
En el campo de la innovación resulta crucial aprovechar las ideas, intuiciones y corazonadas tácitas, y usualmente subjetivas, de empleados, como individuos, y ponerlas a disposición de la empresa. En general, la clave de este proceso es el compromiso personal, el sentido de la identificación de los empleados con su empresa y su misión. Las empresas que aspiran a la categoría de clase mundial deben no solo interiorizar este concepto en la ejecución de cada proyecto, sino que, además, generar los canales de comunicación que permitan escalar, fácilmente, estas ideas.
Las estrategias de colaboración, fundamentales en la ruta de clase mundial, requieren conjugar personas procesos y tecnología parar ser exitosos, en este contexto se deben definir las estrategias de cooperación, establecer contacto con otras empresas, redes o cluster, implementar acuerdos, establecer bases de datos, abiertas a los participantes, de necesidades o disponibilidad de recursos, incluyendo los humanos.
La mecánica de la práctica, es la clave en el desarrollo de una empresa de clase mundial, es decir, la búsqueda permanente de esta categoría, en todos los ámbitos involucrados, y no el desarrollo de iniciativas o proyectos particulares. En este sentido, resultaría contraproducente que las empresas restringieran su ruta de clase mundial de manera exclusiva al proyecto que actualmente desarrollan.
Esta tesis es un desarrollo piloto referido a la experiencia de tres empresas dentro del programa de desarrollo de proveedores de una empresa minera multinacional operando en Chile. Esta experiencia podrá ser transferible en cuanto se resguarden las condiciones específicas de cada caso y no pretende, por tanto, ser un modelo generalista.
Identifer | oai:union.ndltd.org:UCHILE/oai:repositorio.uchile.cl:2250/112737 |
Date | January 2012 |
Creators | Álvarez Arriagada, Manuel Alejandro |
Contributors | Zaviezo Schwartzman, Luis, Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas, Departamento de Ingeniería Industrial, Burgos Rodríguez, Loreto, Held Barrandeguy, Gastón |
Publisher | Universidad de Chile |
Source Sets | Universidad de Chile |
Language | Spanish |
Detected Language | Spanish |
Type | Tesis |
Rights | Attribution-NonCommercial-NoDerivs 3.0 Chile, http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/3.0/cl/ |
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