Ingeniero Civil / En la Región Metropolitana es común encontrar hogares y edificios de uso público que sufren de elevadas temperaturas interiores en verano, causando malestar en las personas que los habitan. Este fenómeno, denominado sobrecalentamiento, es originado principalmente por el uso desmedido del vidrio, mala ventilación, despreocupación por la orientación de las fachadas y en general, por diseños arquitectónicos deficientes respecto al confort térmico.
El objetivo de este trabajo es generar recomendaciones y buscar alternativas que logren disminuir o evitar el sobrecalentamiento en los hogares de la Región Metropolitana. Para ello, se estudió la reglamentación térmica nacional y se modeló el comportamiento térmico de un dormitorio en un departamento ubicado en la ciudad de Santiago. Además, se verificó el nivel de satisfacción actual de los usuarios con sus hogares mediante una encuesta realizada a 180 personas.
Para la modelación, se desarrollaron distintos casos modificando la transmitancia térmica del muro y del vidrio, la orientación del dormitorio y el tamaño de la ventana, obteniéndose la temperatura interior del recinto con el fin de encontrar la superficie óptima de ventana para mantener el confort. Además, se comparan los modelos incorporando dos técnicas de acondicionamiento pasivo: ventilación nocturna y protecciones solares.
Con los estudios y modelos se pudo concluir que la reglamentación térmica nacional es deficiente para las condiciones existentes en verano. Esto porque permite grandes extensiones de vidrio en las fachadas cuando se usa doble vidriado hermético (DVH), elevando las ganancias producto de la radiación solar y disminuyendo las pérdidas por la superficie vidriada. Por este motivo, se produce un incremento del efecto invernadero del vidrio, lo que genera un aumento excesivo de la temperatura al interior de los recintos en verano.
Además, se pudo concluir que la aplicación conjunta de la ventilación nocturna con protección solar es necesaria para alcanzar el confort térmico al interior de los hogares, manteniendo una superficie adecuada de vidrio en las fachadas, cercanas al 25% por orientación, lo que no requiere de una gran inversión. Si no son consideradas estas técnicas, la superficie vidriada no debería superar el 20%, en el mejor de los casos, para mantener condiciones de confort mínimas al interior del hogar, lo que lo hace impracticable arquitectónicamente.
Identifer | oai:union.ndltd.org:UCHILE/oai:repositorio.uchile.cl:2250/147403 |
Date | January 2017 |
Creators | Díaz Anguita, Joaquín Rodrigo |
Contributors | Bustamante Sepúlveda, Miguel, Yachan Vera, Matías, Campusano Brown, David |
Publisher | Universidad de Chile |
Source Sets | Universidad de Chile |
Language | Spanish |
Detected Language | Spanish |
Type | Tesis |
Rights | Attribution-NonCommercial-NoDerivs 3.0 Chile, http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/3.0/cl/ |
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