Introducción
Las ectasias corneales constituyen un grupo de patologías que causan una deformidad corneal compleja difícil de corregir con medios simples. De éstas la más importante es el queratocono, dado que es frecuente, los sujetos suelen ser jóvenes y la afectación bilateral. Al tratarse de una situación incapacitante, tiene gran relevancia social.
En estadios poco avanzados de la enfermedad se pueden corregir los defectos ópticos de forma exitosa con medios simples como gafas o lentes de contacto. En un número importante de casos esto no es posible y deben emplearse vías terapéuticas más complejas como el trasplante de córnea. Éstas son sustancialmente más económicamente y no están exentas de complicaciones.
El tratamiento de las ectasias corneales cuenta sin embargo con técnicas terapéuticas intermedias menos agresivas que pueden frenar la progresión, corregir defectos refractivos complejos y evitar finalmente el trasplante de córnea. En este sentido, el implante de segmentos anulares intracorneales (SAIC) constituye una alternativa terapéutica que, de forma empírica, ha demostrado gran utilidad en la corrección de astigmatismos irregulares.
Material y métodos:
El trabajo presentado tiene como propósito final contribuir en la correcta indicación de los SAIC y facilitar un pronóstico más fiable a nuestros pacientes.
Este trabajo pretende además de aportar un compendio de conocimientos actuales relativos al implante de SAIC, realizar un análisis pormenorizado de una muestra de 410 pacientes sometidos a la citada intervención. Uno de los puntos fuertes del análisis es la metodología empleada donde solo se ha tomado un ojo por paciente para el estudio estadístico. Otros puntos no menos importantes han sido la inclusión de nuevas variables, no recogidas en la literatura, como la toma de agudeza visual con lente de contacto rígida, la valoración de parámetros de seguridad como la horizontalidad o la clasificación de la muestra en percentiles para las variables más importantes.
Resultados y discusión:
La mayoría de los parámetros analizados después del implante de SAIC permanecen estables a partir de los 6 meses, excepto los relativos a la agudeza visual que pueden cambiar hasta doce meses después de la intervención. Por este motivo los estudios deben realizarse, por lo menos a 1 año.
El implante de SAIC es un procedimiento seguro ya que cuenta con pocas complicaciones. La utilización adicional del láser de femtosegundo ofrece una gran precisión del implante.
Los cambios obtenidos mediante el implante de SAIC en la arquitectura se basan principalmente en la disminución de los valores topográficos y aberrométricos, exceptuando la curvatura mínima. Por este motivo objetivamos una mejoría del astigmatismo manifiesto que produce un incremento en la agudeza visual con y sin corrección.
Los pacientes con mayor grado de incapacidad visual muestran mayores cambios tras la intervención en la mayoría de las variables, especialmente en grados máximos. Sin embargo, a pesar de estos cambios no hay traducción a nivel de mejora sustancial de la agudeza visual. Por otra parte, los pacientes con grados de incapacidad visual bajos son los que acaban con mayores beneficios sobre la agudeza visual final, siendo ésta más próxima a la potencial.
La buena agudeza visual preoperatoria, la curvaturas máxima menor, la curvatura menores más parecida a la fisiológica, la aberración comática baja, la paquimetría mas altas y la esfera positiva son factores predictivos positivos.
Conclusión:
El implante de SAIC produce una serie de cambios a nivel refractivo en la arquitectura de la córnea que mejoran la cantidad y la calidad visual, con el consiguiente beneficio para los pacientes afecto de queratocono. / Introduction
Corneal ectasia are a group of diseases that cause complex corneal deformity difficult to correct with simple means. Of these, the most important is keratoconus, given the fact this is a common disease, the patients are usually young and they suffer from bilateral involvement. Being a disabling situation, it has great social relevance.
In less advanced stages of the disease the optical defects can be successfully corrected by simple techniques such as glasses or contact lenses. In a number of cases such approach is not possible, and more complicated therapeutic alternatives, as corneal transplantation should be considered. Nevertheless these procedures are economically burdensome and are not exempt of complications.
The treatment of corneal ectasia include though intermediate less aggressive therapeutic tools that can effectively prevent progression, fix complex refractive defects and finally avoid corneal transplantation. In this regard, the intracorneal ring segments (ICRS) represents an alternative therapy that empirically has proven useful in the correction of irregular astigmatism.
Material and methods:
The ultimate aim of this work is to contribute to the correct indication of ICRS and to provide a more reliable prognosis for our patients.
This work also aims, in addition to provide an overview of current knowledge related to ICRS, to perform a detailed analysis of a sample of 410 patients treated with this technique. One of the strengths of the analysis is the methodology used which has taken only one eye per patient for the statistical study. Other equally important points have been the inclusion of new variables, not reported in the literature, such as taking visual acuity with rigid contact lens, the assessment of safety parameters such as horizontality, or the sample classification shown in percentiles for most important variables.
Results and discussion:
Most of the analyzed parameters remain stable after 6 months of ICRS intervention except those related to visual acuity that can change further up to twelve months after surgery. For this reason the exploration must be extended at least for 1 year.
The implant of ICRS is a safe procedure provided it has few complications. The additional use of femtosecond laser provides high accuracy to the implant.
The architectural changes achieved by ICRS are based primarily on the reduction of topographic and aberrometric values except the steepest curvature. Therefore we can demonstrate improvement of astigmatism that results in an increase in visual acuity without correction.
Patients with higher visual impairment show major changes after surgery in most variables, especially in maximum degrees. However, despite these positive changes, they do not strictly correlate with substantial improvement of visual acuity. Moreover, patients with low degrees of visual impairment are ending with more benefits on final visual acuity, this being finally closer to the potential.
Good preoperative visual acuity, lower maximum curvatures, steepest curvature closer to physiological, low comatic aberration, higher pachymetry and positive sphere are positive prediction factors.
Conclusion:
Implants of ICRS produce a series of changes in the refractive architecture of the cornea that result in the improvement of visual quantity and quality, with the consequent benefit for the patients affected of keratoconus.
Identifer | oai:union.ndltd.org:TDX_UAB/oai:www.tdx.cat:10803/385744 |
Date | 18 January 2016 |
Creators | Lamarca, Jose |
Contributors | García Arumí, José, Barraquer, Rafael I., Universitat Autònoma de Barcelona. Departament de Cirurgia |
Publisher | Universitat Autònoma de Barcelona |
Source Sets | Universitat Autònoma de Barcelona |
Language | Spanish |
Detected Language | Spanish |
Type | info:eu-repo/semantics/doctoralThesis, info:eu-repo/semantics/publishedVersion |
Format | 367 p., application/pdf |
Source | TDX (Tesis Doctorals en Xarxa) |
Rights | L'accés als continguts d'aquesta tesi queda condicionat a l'acceptació de les condicions d'ús establertes per la següent llicència Creative Commons: http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/3.0/es/, info:eu-repo/semantics/openAccess |
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