Hoy como en el pasado, el interés de los líderes de los negocios radica en hacer más competitivas sus empresas a la vez que procuran mantener a raya los costos y administran el haber. El medio de los negocios de hoy es más enmarañado que en el pasado, afrontan un nivel de complejidad creciente ocasionado por la globalización, por tecnologías nuevas, por la rapidez con que cambian los mercados y por la competencia surgida de los lugares más inesperados. Convertirse en líderes empresariales significa asumir el cambio de nuestros destinos, definiendo claramente metas sin ninguna limitante. Es por ello que la mejora continua es una competencia tan importante para la organización, y es formalmente descrita en toda estrategia organizacional.
En los últimos años nuestro país ha sido testigo de una sorprendente y saludable revalorización de la gestión logística como eje para la obtención de ventajas competitivas diferenciales. Es que la percepción de la magnitud de los recursos corrientes y permanentes comprometidos en este tramo de la tarea empresarial, sumada al reconocimiento de que muchas de las promesas de servicio se construyen y consolidan desde la logística, ha capturado la atención de los directivos ávidos de una explotación plena de estas posibilidades.
Uno de los resultados concretos de este creciente interés se muestra en la evolución de la participación de las inversiones asociadas a actividades logísticas en el universo de aplicaciones de las compañías, en casi todos los rubros de la actividad económica y directamente como una especialización empresarial de envergadura.
Una porción sustancial de este flujo ha sido comprometida en el diseño o revisión de la operación de centros de distribución, basados en una concepción amplia e integrada de la gestión de distribución entre los distintos participantes en una cadena logística compleja.
Los llamados centros de distribución son el eslabón de la cadena destinado habitualmente a la desconsolidación de carga proveniente de una o mas plantas y a su consolidación en pedidos de diverso tamaño e integración, habitualmente también tras un periodo cada vez menos prolongado de almacenamiento, para su entrega a clientes de naturaleza diversa en uno o mas canales de llegada al consumidor final. Los estándares con que se planeen, ejecuten, evalúen y midan estas actividades son de vital importancia tengan registro y reconocimiento internacional, no por el solo hecho de poseerlo, sino por lo que ello implica, al permitirle un reconocimiento cualitativo que implica niveles de eficiencia tales que garantizan la calidad del producto y la oportunidad con que es satisfecha la entrega.
Es por eso que los Estándares de Distribución nos permitirán identificar y clasificar los niveles de excelencia que debemos alcanzar para lograr una correcta administración y gestión de nuestros procesos de distribución. Estos incluyen un sistema de medición, que nos permitirá saber en dónde estamos y qué tan lejos nos encontramos de los niveles de excelencia. Asimismo, se consideran evaluaciones regulares, que nos indicarán si estamos en el camino correcto, reconocer y celebrar los progresos que se vayan teniendo. Debemos tener en cuenta que en el futuro estos estándares deberán ser renovados nuevamente, como parte del proceso de mejora continua. / Tesis
Identifer | oai:union.ndltd.org:PERUUPC/oai:repositorioacademico.upc.edu.pe:10757/625929 |
Date | 01 January 2009 |
Creators | Zamalloa Barrera, José Manuel, Echeverría Carrillo, José Alberto |
Publisher | Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas (UPC) |
Source Sets | Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas (UPC) |
Language | Spanish |
Detected Language | Spanish |
Type | info:eu-repo/semantics/masterThesis |
Format | application/pdf, application/epub, application/msword |
Source | Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas (UPC), Repositorio Académico - UPC |
Rights | info:eu-repo/semantics/openAccess, Attribution-NonCommercial-ShareAlike 3.0 United States, http://creativecommons.org/licenses/by-nc-sa/3.0/us/ |
Page generated in 0.0019 seconds